Bogotá vive una nueva jornada del Día sin Carro. A partir de las 6:30 de la mañana los ciudadanos se han desplazado hacia sus destinos haciendo uso de bicicletas, patines, motos, taxis, buses, TransMilenio o bien caminando.Esta norma se viene presentando desde el año 2000, por iniciativa del ex alcalde Enrique Peñalosa, quien adoptó la idea francesa con el ánimo de reflexionar sobre el deterioro ambiental, y a su vez, con la intención de obtener una movilización más fluida.
Por novena vez los bogotanos que usualmente hacen uso de su vehículo particular, salieron de sus casas para adoptar medios de transporte alternativos como lo son la bicicleta y los patines principalmente.
La Alcaldía de Bogotá ofrece a los ciudadanos diversos medios de circulación, tales como ciclo rutas y carriles exclusivos para ciclistas y peatones.
Si bien es cierto que un gran porcentaje de los bogotanos se desplazan empleando vehículos públicos, otros tantos prefieren caminar o desempolvar sus monopatines.
A consecuencia de la congestión y las multitudes muchos de los ciudadanos han tenido que recurrir a otros medios para poder llegar a sus destinos puntualmente.
Los vehículos insólitos que pueden transitar y contribuyen en cierta forma al traslado de las personas han sido de gran utilidad ya que el transporte público no ha logrado abastecer las necesidades de los bogotanos.
Basta dar un solo vistazo por las calles de la capital para presenciar la recursividad de los conductores de carros de carga que hacen su Agosto movilizando a personas en el interior de sus carros.
La presencia de las zorras no ha faltado en las calles de Bogotá, estos coches circulan con total normalidad, tanto así que algunos peatones utilizan éste medio para apresurar su llegada al trabajo, la universidad y demás.
Las calles vacías de la capital resaltan el tránsito de carrozas fúnebres, ambulancias y carros de bomberos cuya circulación es indispensable. Su aparición por las vías es esporádica pero permitida por la Alcaldía Mayor de Bogotá.Carros diplomáticos que en un día corriente pasan de inadvertidos, hoy son antagonistas de un mecanismo que busca el uso racional del vehículo particular.
Buses, busetas y microbuses no dan a basto por la demanda de personas que quieren emplear sus servicios, sin embargo han acelerado sus rutas permitiendo así una circulación más fluida.
La Alcaldía de Bogotá ha preparado con anterioridad este día con el ánimo de demostrar a los capitalinos que la ciudad puede alcanzar un grado de cotidianidad sin los automóviles.
Se acondicionaron cerca de mil buses de TransMilenio durante todo día para agilizar el traslado de la gente, pese a esta medida el flujo de personas aumenta en las horas pico de forma notable ya que está estimado un incremento del 5% de la gente que hará uso de éste medio.
Otro tipo de transporte que ha tenido gran solicitud ha sido el de los taxis que pese a ser muy superior a otros, no alcanza a satisfacer las necesidades de muchas personas debido a que algunos de éstos no se encuentran libres en ciertos sectores.
Las avenidas de la ciudad evidencian calma pese al volumen de automóviles públicos que prestan su servicio. En el caso de TransMilenio, se habilitaron mil buses del sistema y cuatrocientos alimentadores.
Frente a años anteriores en los que se ha llevado a cabo el Día sin Carro, las calles de Bogotá evidencian una mayor calma puesto que los organismos de control y logística han realizado una fuerte campaña que busca organizar a los ciudadanos con el fin de evitar contratiempos.
La presencia de la policía de Tránsito ha sido vital ya que antes de la jornada se presentaron algunas congestiones en importantes vías de la ciudad, a consecuencia de que algunos automóviles particulares decidieron salir a sus destinos antes de que la norma diera inicio.
En términos generales se puede afirmar que la novena edición del Día sin Carro ha tenido gran acogida debido a que se han implementado diversas fórmulas publicitarias.
Pese a todas las medidas adoptadas por los organismos de logística, cabrían mejoras en lo que respecta a los servicios de transporte público ya que la capacidad de los vehículos no es suficiente para la demanda que presentan. Otros vehículos como motos y ciclas no reportan inconveniente alguno porque las vías de circulación son fluidas y organizadas.
Fotos tomadas de www.eltiempo.com
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